Fabricar en Galicia y competir con países asiáticos implica “un continuo esfuerzo en I+D”, así como una clara apuesta por “la calidad del producto”. A juicio de Javier Acosta, director general de Egatel, que el trabajo diario siga “el camino de la innovación” es “una  garantía de supervivencia para la empresa, tanto a medio como a largo plazo”.

Egatel, ¿completa todo el ciclo del producto, desde el diseño hasta la fabricación, o subcontratan las fases de menor valor añadido?

Cumplimos todo el ciclo del producto, desde el I+D a la puesta a punto del equipo en campo. Solamente para grandes series subcontratamos las tareas de poco valor añadido, como pueden ser el montaje de racks o la inserción de componentes electrónicos.

¿Qué nivel de inversión destina Egatel a I+D? ¿Es posible mantenerlo en estos tiempos de crisis?

Destinamos porcentajes superiores al 15%. No nos planteamos el reducir estas cifras, aun en tiempos duros como estos. El I+D es la garantía de supervivencia de Egatel a medio y largo plazo, lo tenemos muy claro.

¿Cómo es posible fabricar en Galicia y competir con países con costes laborales mucho más bajos, como los asiáticos?

Las claves están en apostar por el continuo esfuerzo en I+D y en la alta calidad del producto. Esto permite lograr unos márgenes comerciales aceptables que soportan un coste salarial medio, aunque, evidentemente, más altos que en los países citados.

Egatel fue uno de los protagonistas del proceso de ‘apagón analógico’ en España. La empresa había asegurado en su momento que era la principal proveedora de equipos de transmisión. ¿Cuáles fueron las claves para alcanzar el éxito?

El éxito no fue exclusivo de Egatel, sino de la industria gallega del broadcast profesional. Somos tres empresas gallegas que hemos suministrado alrededor del 70% de los equipos necesarios para la transición a la televisión digital. Esto se debió al desarrollo específico de unos equipos muy adaptados a las necesidades de despliegue de red de los operadores, básicamente equipos de baja potencia muy modulares.

El proceso de ‘apagón digital’ se completó satisfactoriamente y lo que viene ahora es el ‘dividendo digital’. ¿Están preocupados por la posible reducción del número de canales de TDT que ha anunciado el Gobierno?

Nuevamente, la política afecta a un proyecto técnico y de desarrollo industrial. Estábamos de acuerdo con el plan de implementación del “dividendo digital” aprobado en la anterior legislatura, pero una vez más a nuevo Gobierno parece que hay que cambiarlo todo porque sí. Tal como lo entiende ahora la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones el “dividendo digital” es solamente aportar nuevas frecuencias a los operadores de móviles en detrimento de los operadores de radiofrecuencia, canales de televisión, antenistas, instaladores y, por supuesto, fabricantes. Y todo podría ser compatible con un coste razonable, aun en tiempos de los mal entendidos “recortes”.

Sus principales clientes son las empresas de broadcast. ¿En qué medida le está afectando la crisis económica?

La crisis en la que está inmersa Europa y particularmente España afecta a todos directa o indirectamente, desde el fabricante de chocolate a la clínica dental y, desde luego, a nosotros y a nuestros clientes. El citado anteriormente “dividendo digital” es un buen ejemplo, como disculpa de la crisis, se niega la inversión necesaria para el crecimiento.

¿Qué esfuerzo exige y qué ventajas aporta trabajar, como hace Egatel, con todos los estándares tecnológicos internacionales de TDT?

Primero es una necesidad si quieres vender en todos los mercados, y segundo, no es un problema técnico que nos haya costado mucho resolver. No entramos en la discusión de qué estándar es mejor para un determinado país, ofrecemos lo que se nos solicita.

¿Qué porcentaje de su facturación procede de fuera de España? ¿Tienen planes para incrementar su internacionalización?

El año pasado, el 30% de nuestra facturación ha sido en el exterior y seguirá creciendo este año y posteriores. No queda otro remedio ante la escasez de demanda en nuestro país. Debemos aprovechar, además, la experiencia exitosa de la digitalización en España para exportarla a aquellos otros países que están inmersos en el mismo proceso. Para ello, hace tres años que Egatel ha creado un equipo de comerciales exclusivos para el mercado internacional, en la sede de nuestro Grupo COMSA EMTE en Madrid.

¿Qué proyectos destacaría entre los desarrollados por Egatel fuera de España?

Poco a poco se van sumando nuevos proyectos en diferentes localizaciones. Unos destacan por su volumen económico, otros por la introducción de nuevos equipos en mercados a los que no teníamos acceso y, finalmente, otros de carácter marcadamente estratégicos por el potencial crecimiento en una determinada zona. Entre todos ellos podríamos destacar por ser reciente el suministro en Marruecos de transmisores digitales DVB-T/H de 500 vatios de potencia.

Para una empresa líder en un sector tecnológico puntero y con sede en Ourense, ¿cómo es posible retener el talento desarrollado en la propia compañía sin que la ‘fuga de cerebros’ suponga un problema?

La sede en Ourense es ya una señal de identidad para Egatel. El futuro profesional de un universitario que está acabando sus estudios de Teleco en Vigo no debe mirarlo en la gran multinacional en Madrid, sino que debe sentirse atraído por aquellas empresas de su tierra que efectivamente son tecnológicamente punteras en su sector. No es fácil, es cierto, pero lo estamos consiguiendo a base de colaboraciones con universidades y otros organismos.

Egatel está integrada en COMSA EMTE. ¿Qué encaje tiene la empresa en este grupo y de qué nivel de independencia goza?

El pertenecer a un grupo con cerca de 10.000 personas y más de 2.000 millones de euros en facturación aporta muchas cosas a Egatel. La básica: capacidad financiera y organizativa para acometer proyectos importantes en competencia con los grandes fabricantes mundiales. Egatel destaca dentro de COMSA EMTE por ser la única empresa fabricante y de I+D, con el componente tecnológico más alto de todas las que conforman nuestro grupo. Esta característica nos hace tener cierta independencia que es de agradecer.

¿Es Egatel un ejemplo a seguir por el sector TIC gallego como firma que, apostando por la especialización, ha conseguido un posicionamiento de privilegio en su nicho de mercado?

Modestamente, no tenemos intención de ser ejemplo de nada. Si alguien ve algo bueno en Egatel, encantados. Lo que sí quisiéramos destacar es que el estereotipo del gallego dependiente del mar (pesca, conservas, astilleros...) se va acabando. Existen empresas gallegas con un nivel tecnológico muy alto y debemos ser nosotros, los gallegos, los primeros en saberlo para poder transmitirlo. Y el camino que queda por recorrer es muy largo, pero merecerá la pena.