La falta de material sanitario con la que lidia la Xunta para surtir a los centros sanitarios para hacer frente a la pandemia del coronavirus, ha llevado a un consorcio de empresas gallegas a desarrollar en menos de una semana un respirador de bajo coste para su fabricación en la comunidad. El grupo, encabezado por la empresa coruñesa Bionix liderada por Jacobo Penide, fundador y consejero delegado, prevé comenzar a producir en serie en dos semanas. El consorcio engloba a otras cinco firmas (Cinfo, Electrónica&Comunicaciones, Dimalnox, i3DAtlántico y Blanco Mayer), el Clúster TIC Galicia y la Fundación Nóvoa Santos.

El proyecto surgió el pasado día 18 con el fin de responder a la situación de colapso hospitalario que sobrevendrá en cuanto Galicia alcance el pico de contagios. "Ese mismo día comenzamos con el diseño conceptual de mecánica, hidráulica, hardware y software y el Clúster TIC coordinó la integración de otras empresas", cuenta Jacobo Penide, ingeniero en telecomunicaciones, que destaca que Cinfo se sumó "de forma inmediata", captando luego a firmas del sector metalmecánico, de la impresión 3D y la electrónica.

El primer prototipo ya está totalmente operativo, y ahora se encuentra en fase de pruebas con simuladores para afinar el dispositivo, «el primer paso es probarlo en un pulmón artificial y lo siguiente será ensayarlo en animales, antes de utilizarlo en humanos». La previsión es poder comenzar a fabricar "en el plazo de dos semanas". Una vez en marcha, la idea es surtir "a cualquier lugar de España que lo necesite", recalca Penide. En el diseño del prototipo también se embarcó un equipo de anestesistas que "validó el diseño conceptual y los requisitos mínimos" para atender a pacientes críticos.

«Somos un equipazo. Hemos conseguido un producto totalmente industrializable fabricado con materiales de bajo coste, muy elementales y muy accesibles», explica Jacobo Penide, que apunta como elemento importante el asesoramiento médico, por parte de personal anestesista, que han tenido para el desarrollo del prototipo.

Bionix tiene experiencia en la obtención de certificaciones por parte de la Agencia Española del Medicamento, y sabe cómo homologar el prototipo, que ayer fue presentado a responsables de la Xunta para su ensayo en centros hospitalarios gallegos.